Los trastornos del sueño son más comunes de lo que uno cree, se estima que entre 50 y 70 millones de personas en los Estados Unidos tiene problemas de sueño, de los cuales muchos padecen del conocido síndrome de apnea obstructiva del sueño (SAOS) según afirma el CDC.
Si deseas saber qué es la apnea del sueño, cómo identificarla y tratarla, te invitamos a seguir leyendo este artículo y aprender cosas nuevas.
¿Qué es la apnea del sueño?
Es un problema de salud crónico, es decir que afecta a las personas por meses o años, es un tipo de trastorno respiratorio y del sueño que aparece mientras dormimos.
Así que mientras dormimos nuestra respiración se interrumpe por las siguientes razones:
- Obstrucción de las vías respiratorias superiores (Apnea Obstructiva del Sueño- AOS), se cree que debido a la obesidad, congestión nasal o un aumento significativo del tamaño de las amígdalas y adenoides u otros componentes de la vía aérea superior, generan ronquidos fuertes y tienen mayor riesgo de compresión de las vías respiratorias abiertas causando así estos períodos sin respirar.
- Falta de señales nerviosas a los músculos encargados del control de la vía aérea como son los que conforman al paladar blando, faringe y laringe. Lo cual se conoce como apnea central del sueño.
Las pausas en la respiración mientras dormimos pueden ser desde cinco hasta muchas más por hora de sueño cuando sufrimos de estos tipos de apnea.
En estos lapsos los niveles de oxígeno bajan y se acumula dióxido de carbono en los diferentes órganos. Por lo tanto, cuando el cerebro se percata de este desequilibrio, envía una señal para respirar.
Esto se repite durante cada noche afectando la calidad del sueño y el desarrollo normal de sus fases.
demás desencadena otros problemas de salud, como: enfermedad cardiovascular (hipertensión arterial, insuficiencia cardíaca y ataque cardíaco), diabetes, glaucoma y accidentes cerebrovasculares, llegando a afectar la calidad de vida si no es tratada a tiempo.
Es importante resaltar que estos problemas surgen cuando el problema perdura por múltiples años y no ocurren de forma abrupta.
¿Cómo saber si tu descanso es interrumpido por la apnea del sueño?
La única forma de saber con certeza que no sufres de la apnea del sueño es asistir a una consulta con un médico especialista en neumología u otorrinolaringología y te realicen estudios del sueño.
Sin embargo, existen síntomas que te pueden hacer sospechar de que sufres apnea del sueño.
El más común es la somnolencia diurna (hipersomnia) donde no te sientes bien descansado y las múltiples horas de sueño no parecen ser suficiente.
Otros signos y síntomas de la apnea del sueño que pueden aparecer son:
- Ronquidos fuertes y persistentes.
- Hipopnea nocturna (respiración débil durante las horas de sueño).
- Despertar abrupto por falta de aire.
- Dolores de cabeza matutinos.
- Dificultad para concentrarse.
- Cambios en el estado de ánimo con mayor tendencia a lo melancólico y depresivo.
- Presión arterial alta en horas de la mañana.
- Xerostomía (boca seca).
- Irritabilidad.
Si presentas alguno o varios de estos síntomas es momento de visitar a tu médico de cabecera para ver confirmar si sufres de este problema, afortunadamente existe un sinfín de herramientas y recursos para detener esto.
¿Qué puedes hacer para superar la apnea del sueño y descansar mejor?
Existen numerosos tratamientos médicos para lidiar con este problema durante las horas de sueño.
Entre estos el más destacado son los dispositivos para respirar, como las máquinas de presión positiva continua en las vías respiratorias o CPAP Machine, en inglés.
Esta máquina es una mascarilla que se encarga de crear una presión de aire mayor a la que usualmente respiramos y este oxígeno a presión desplaza la causa de obstrucción y permite un flujo y respiración completamente normal.
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A pesar de que este dispositivo es altamente efectivo para controlar este síndrome, algunos pacientes dejan de sufrir estos síntomas sin necesidad del equipo cuando modifican su estilo de vida y reducen ciertos factores de riesgo.
A continuación una lista de factores a tomar en cuenta para controlar la apnea del sueño:
Pérdida de peso
La obesidad es un factor predisponente para desarrollar este tipo de apnea, ya que existe un peso mayor sobre los músculos y estructuras de las vías respiratorias.
En consecuencia, al ser comprimidas producen constricción de la vía respiratoria y se deja de respirar por múltiples minutos hasta que en el sistema nervioso se activan centros específicos para generar una apertura de la vía aérea, así sea de manera momentánea.
Por consiguiente, una vez que se logra la pérdida de peso, todos estos síntomas van desapareciendo.
Aunque parezca un paso complicado, puedes perder controlando las porciones de carbohidratos, grasas y sal que consumes diariamente y suplementar con actividad física.
La OMS establece que para mantenernos en un peso saludable deberíamos caminar por lo menos 30 minutos diarios sin detenernos.
La Clínica Mayo en los Estados Unidos ha publicado una lista de 6 estrategias que debes seguir si deseas perder peso a mediano-largo plazo donde sin duda la motivación de hacer cambios en la dieta e incorporar ejercicio son indispensables.
Dejar de fumar
Por razones aún no muy bien conocidas, el hecho de fumar puede aumentar hasta 3 veces el riesgo de padecer apnea obstructiva del sueño o incluso exacerbar sus síntomas si la persona ya sufre de esta enfermedad.
Se cree que esto puede deberse al rol pro inflamatorio que tiene el cigarrillo en las vías respiratorias, aumentando la secreción de mocos y células inflamatorias que terminan obstruyendo de forma parcial el tracto respiratorio.
Evitar el consumo de alcohol
El alcohol tiene un efecto relajante en los músculos de la faringe que conforman a la vía respiratoria, esto puede exacerbar los síntomas de la apnea.
De forma adicional, el alcohol actúa como la mayoría de sedantes en el sistema nervioso, pudiendo enlentecer la respiración normal.
Dormir en una posición diferente
Si le diagnostican apnea del sueño, puede adaptar su posición para dormir para ayudar a aliviar los ronquidos y promover una respiración más constante.
La mejor postura para evitar la apnea del sueño es dormir de lado. Aunque se piense que dormir boca arriba puede mejorar estos problemas de respiración, es mucho mejor tener una posición de lado a modo que el paciente no estaría forzado ninguna de las partes interiores de su cuerpo que ayudan a esta tarea.
Actividad física regular
La apnea del sueño es un síndrome prevalente en nuestra sociedad y los efectos que el ejercicio puede tener en su desarrollo son desconocidos.
Sin embargo, sabemos los efectos positivos que tiene la actividad física para reducir la obesidad y sobrepeso, es una de las principales recomendaciones que dan los médicos para reducir este problema.
Adicionalmente, se ha comprobado científicamente que solo el hecho de caminar, está asociado con una reducción del 10% en el riesgo de desarrollar apnea del sueño.
Aún se desconoce qué efecto podría llegar a tener deportes de mayor intensidad como son la natación o el ciclismo, pero probablemente sea un efecto aún más positivo.
Usar ropa de cama fresca y liviana
Los síntomas de falta de aire podrían ser peores si usas sábanas pesadas y calurosas. Por lo que te recomendamos utilizar ropa de cama fresca con el fin de y que percibas menos falta de aire o presión.
Evitar el uso de pantallas antes de dormir
Estar en los celulares o computadoras no es del todo malo, el problema radica en el estrés antes de dormir que nos puede producir.
Cuando estamos estresados respiramos mal. Se trata de una respiración rápida y superficial en la que solo se llena de aire la parte superior de los pulmones intentando aumentar la concentración de oxígeno.
Es decir, estamos hiperventilando, algo útil si te persigue un oso, pero nada recomendable cuando estás acostado tratando de dormir.
La tensión en los músculos y la anticipación también dispara otra respuesta natural a las amenazas: aguantar la respiración, es decir, apnea.
Esto aumenta la presión arterial, de nuevo algo conveniente para situaciones de alerta pero no beneficioso durante las horas de sueño.
Así que te recomendamos dejar de utilizar los equipos electrónicos media hora antes de acostarte y si se utilizan que sea con fines más centrados en la relajación.
Mantener la habitación aireada y fresca
Un buen descanso puede llegar a ser alterado por múltiples factores externos, desde cuánta luz hay en el cuarto hasta cuánto aire puede entrar en la habitación.
Sin lugar a dudas, la apnea del sueño es un trastorno importante a tratar en el que la respiración se detiene repetidamente durante el sueño. Con el tiempo, esto puede dañar el corazón, los pulmones y otros órganos, e incluso provocar una muerte prematura. Se hace importante notar si sufres de estos síntomas y acudir con tu médico de cabecera para buscar la mejor alternativa para ti.
Afortunadamente, existen medios tecnológicos como los dispositivos de presión positiva que pueden ser molestos, ya que deben ser utilizados durante todas las noches, pero son altamente efectivos para no sufrir apnea durante el sueño.
En definitiva, al reducir los factores de riesgo como peso, tabaquismo y mejorar la posición al dormir se puede reducir la gravedad del problema. Recuerda siempre consultar con tu médico de confianza que te dará las mejores herramientas para dormir sanamente.
Si te interesa aprender más sobre factores que afectan al sueño y el buen dormir, te invitamos a visitar nuestro blog, pues con un buen colchón podrás descansar mejor y combatir los síntomas de la apnea.
Equipo editorial Luuna
