Durante el día puedes llegar a experimentar una serie de emociones que sin duda alguna tendrán efectos no solo mentales sino también físicos. El cuerpo humano es un receptor también de toda la actividad mental al cual lo sometemos cada minuto. El dolor de espalda por estrés es una de las consecuencias de las emociones “negativas”.
Un estudio realizado por la Universidad de Aalto, en Finlandia, demuestra cómo los humanos somos capaces de experimentar reacciones físicas debido a nuestras emociones. Por ejemplo, el miedo puede causar gran actividad en la zona del tronco.
Por su parte, cuanto se experimenta felicidad la cabeza y el pecho son los protagonistas, sin embargo, la actividad en todas las partes del cuerpo, se incrementa. El estrés no escapa de esto, la contracción de los músculos en la espalda se convierte en una de las principales sensaciones.
Dolor de espalda por estrés ¿cómo se produce?
Cuando te encuentras bajo una situación estresante, lo músculos de tu espalda, mandíbula y cuello tienden a contraerse. Este fenómeno ocurre debido a que el cerebro envía mensajes a través del sistema nervioso y hacia dichos músculos para que permanezcan en estado de alerta.
Estos síntomas de dolor de espalda por estrés pueden empeorar si no se mantiene un movimiento constante en esta área. La disminución del flujo sanguíneo y la falta de oxigenación son factores que perjudican aún más el estrés en la espalda.
Consecuencias de los dolores de espalda
La mayoría de las personas que presentan este tipo de dolores de espalda, tienden a:
- Disminuir el umbral del dolor. Por consiguiente, la tolerancia se vuelve más pequeña y la incomodidad más frecuente.
- El dolor de espalda por estrés hace propensa a las personas a tener una actitud negativa, esto implica que se predisponen a disminuir sus capacidades.
- Por otro lado, la confianza en sí mismo para controlar el dolor se ve mermada. Incluso se pierde la confianza en los profesionales de poder solventar los problemas de dolor de espalda por estrés.
- Del mismo modo, se incrementa el miedo a sentir dolor y esto conlleva a una reducción en las actividades típicas.
Recomendaciones para disminuir el estrés en la espalda
Entre las recomendaciones más frecuentes por los profesionales quiroprácticos para disminuir el dolor de espalda por estrés está realizar ejercicio de forma frecuente. Por otro lado, mantener una buena postura durante el día y la noche también es sumamente importante. A continuación, explicaremos estas y otras estrategias:
Ejercicios para los dolores de espalda
Es bien conocido que el ejercicio físico es una de actividades más beneficiosas para la salud física y mental de todo ser humano. Esta es una de las herramientas más poderosas para contrarrestar el dolor de espalda por estrés.
Puedes incluir a tu rutina una hora de ejercicios diarios que te permitan mantener una actividad y movimiento constante. Otra forma, si no dispones de mucho tiempo, puede ser la realización de sesiones de yoga en tu cama antes de dormir para aliviar las tensiones musculares y reducir el estrés en la espalda.
Espalda fuerte, menos estrés
Otra de tus opciones para aliviar el dolor de espalda por estrés es ejercitar tu espalda con más frecuencia de manera que mantengas esa zona con mucha actividad. El estrés en la espalda se puede ver considerablemente reducido ya que las contracturas musculares no son tan constantes al estar bien fortalecida esa zona.
Postura adecuada evita el estrés
El dolor de espalda por estrés se puede volver muy constante si al momento de sentarte en la oficina no adoptas una postura correcta que permita el balance de la carga en tu espalda. Por ello, te invitamos a que cuando te sientes en tu silla de trabajo, mantengas tu espalda pegada al respaldar y ubiques una posición cómoda en donde puedas mantener tus piernas y codos en noventa grados.
Por otro lado, es importante también que al momento de caminar permanezcas erguido para evitar facilitar las contracturas que causan el dolor de espalda por estrés. Para ello te puedes ayudar pegándote a la pared y procurando mantener la espalda baja, los omoplatos y la parte trasera de la cabeza en una misma línea.
Elegir un buen colchón al dormir
Finalmente, a la hora de dormir, es fundamental que cuentes con un colchón que esté bien diseñado. Por ello deberás cerciorarte de que el colchón que estés utilizando tenga un diseño ergonómico y amigable con tu postura al dormir. Esto te permitirá reducir considerablemente el riesgo de presentar dolor de espalda por estrés.
En este sentido, si necesitas encontrar la solución para tu momento de sueño, te invitamos a revisar la tienda Online de Luuna, dónde podrás encontrar un gran variedad de colchones que te ayudarán a mantener una postura adecuada a la hora de dormir gracias a sus diseños ergonómicos.